El Gobierno de Castilla-La Mancha ha dotado al servicio de Oftalmología del Hospital General de Ciudad Real de nuevo aparataje de última generación, que va a permitir proporcionar al paciente un mejor servicio ya que gracias a su utilización se consigue reducir el trauma quirúrgico de la intervención, así como el tiempo de recuperación tras la operación.

Entre el equipamiento adquirido se encuentra un facoemulsificador de nueva generación, que se utiliza para la cirugía de cataratas, y lentes intraoculares de última generación que corrigen aberraciones visuales y cromáticas.

La catarata es una patología crónica asociada al envejecimiento que consiste en la disminución de la agudeza visual provocada por la opacidad del cristalino. La intervención de cataratas implica la extracción del cristalino natural nublado del ojo y su reemplazo posterior por una lente artificial transparente.

Así, con el nuevo facoemulsificador, que utiliza tecnología de ultrasonido para ablandar y dividir el cristalino, se causa el menor traumatismo quirúrgico posible, disminuyendo el porcentaje de complicaciones y mejorando la capacidad de cicatrización del ojo.

Por su parte, las lentes intraoculares que se amoldan a la cápsula del cristalino y reemplazan al natural, se insertan a través de una pequeña incisión y se despliegan dentro del ojo. Estas nuevas lentes se implantan de forma más fácil y menos traumática en el ojo, consiguiendo que desaparezcan las denominadas aberraciones cromáticas. Una vez intervenido, el paciente es capaz de ver los colores mucho mejor.

Por otra parte, el Gobierno regional ha dotado Servicio de Oftalmología del hospital ciudadrealeño de un nuevo vitreótomo de última generación, que se utiliza para solucionar dolencias como la retinopatía diabética, desprendimientos de retina y un amplio espectro de enfermedades vitreoretinianas.

La vitrectromía es una técnica microquirúrgica que elimina el vítreo, gelatina transparente que rellena el globo ocular y que limita por delante con el cristalino y por detrás con la retina y el nervio óptico. Para ello, se introducen, a través de diminutas escisiones dentro del globo ocular, unos delicados instrumentos entre los que están una luz de fibra óptica para iluminar la retina, una cánula de infusión que mantiene la presión intraocular y un instrumento que corta y remueve el vítreo.

El nuevo aparataje adquirido permite trabajar a una velocidad mayor –tres veces más que en su versión anterior—, lo que supone que el traumatismo quirúrgico es menor. Además, el material que se emplea en la intervención es de menor tamaño, con lo que las heridas en el interior del ojo son también más pequeñas y muchas veces no suelen necesitar sutura, reduciéndose así la estancia hospitalaria.

Servicio de Oftalmología del Hospital General de Ciudad Real

El Servicio de Oftalmología del Hospital General de Ciudad Real está dirigido por el doctor Halaoui y está formado por 14 facultativos. Durante el año 2009, ha incrementado notablemente la actividad respecto al año anterior, con 6.800 primeras consultas y cerca de 19.000 revisiones hasta el mes de octubre, consiguiendo una reducción ostensible de las listas de espera.

Asimismo, ha conseguido aumentar el número de consultas de alta resolución, duplicándose respecto al 2008. Con este tipo de consultas se intenta evitar al usuario el máximo número de visitas al centro sanitario, de tal manera que en un único día, el paciente es valorado por el especialista, se le realizan las pruebas diagnósticas oportunas y vuelve a su domicilio con el tratamiento prescrito.